Will Smith: “Tener sentido del humor ayuda a mantenerse joven”

En la película ‘Siete almas’, el popular intérprete encarna a un atormentado samaritano

Will Smith, con un look poco usual en él, durante la promoción de su filme Siete almas en Berlín....

Jerónimo José Martín
Gonzalo del Prado
Madrid

Nacido en Filadelfia en 1968, Will Smith se hizo famoso gracias a la serie televisiva El príncipe de Bel Air. De ella saltó al cine, protagonizando blockbusters de diversa calidad: las dos partes de Dos policías rebeldes y Men in Black, e Independence Day, Enemigo público, Wild Wild West, Yo, robot, Hitch, Soy leyenda, Hancock... Tras foguearse en el drama con La leyenda de Bagger Vance, Ali le valió la candidatura al Oscar 2002 al mejor actor, estatuilla a la que también optó en 2006 por En busca de la felicidad, del italiano Gabriele Muccino
 
Hablamos con Will Smith durante su paso por Madrid para promocionar Siete almas, también de Muccino. En ella, el popular actor da vida a un hombre atormentado por sus culpas, que inicia una penitencia singular, que pasa por ayudar a siete buenas personas que deben dinero a Hacienda.

La película admite una interpretación religiosa. ¿Lo ha tenido en cuenta en algún momento?

Trabajamos Siete almas desde diferentes perspectivas, también desde la religiosa, pues es una historia sobre el amor, la pérdida, el sacrificio… Es la primera película que interpreto en la que no camparto algunas decisiones de mi personaje. Ha sido una nueva experiencia. Y, decididamente, no es la típica película de Will Smith. Espero que la gente vaya a verla con su corazón y su cabeza abiertos.

Parece encajar bien en su propósito de hacer sólo películas que ayuden a mejorar el mundo.

Pues sí. Quiero hacer películas sobre historias que aporten valores positivos a las vidas de los espectadores. Que les hagan reír, y que también les hagan pensar. La experiencia que tuvimos con En busca de la felicidad fue de ese estilo, y creo que es muy emocionante generar valores con algo tan material como una película.

En concreto, impulsan esta película la culpa y la caridad.

Así es. Comenzamos desarrollando el personaje desde la culpabilidad. Estamos ante una persona que ha cometido un grandísimo error, se arrepiente e intenta reparar ese pecado a través de la caridad. Entonces comprende que solamente el amor puede saciar el afán de redención que le domina.

¿Algún hecho le ha cambiado la vida tanto como a su personaje?

Cuando decidí trasladarme a vivir a Los Ángeles y apostar por mi carrera de artista. Fue un momento crítico. Me dije: “Tengo que marcharme y dejar mi casa, mis amigos, mi hogar”. Ahí cambió y despegó mi nueva vida. Pasé mucho miedo.

El protagonista de ‘Siete almas’ ayuda a varios desconocidos. ¿Qué concedería usted a los millones de parados por la crisis?

Les daría esperanza. Estés parado o trabajando, la esperanza es un arma muy poderosa; con esperanza y esfuerzos, cualquiera puede labrarse un futuro, un camino.

¿Cómo se mantiene tan joven?

Procuro contar chistes, disfrutar con mi trabajo y tener siempre una sonrisa. Tener sentido del humor ayuda a mantenerse joven.

Ahora, en su casa son todos famosos: su esposa Jada Pinkett, sus hijos Jaden y Willow... ¿Cómo controla usted la fama?

Afortunadamente, para mis hijos no soy famoso. Soy simplemente ese tío que hace que las luces estén encendidas en casa... (Risas) Supongo que la fama no me atonta porque disfruto con la gente. Sobre todo con mi familia y con esas personas que me han rodeado durante mucho tiempo y que me conocían antes de ser famoso. Ellos me mantienen con los pies en el suelo y me recuerdan las razones por las que comencé a trabajar como actor.

¿Cómo nos sorprenderá ahora?

Si te lo digo, ya no será una sorpresa… (Risas) Estoy elaborando un par de ideas que pueden revolucionar esa mezcla de géneros que tanto me gusta. En todo caso, la sorpresa está garantizada.

Fuente: http://www.gaceta.es